La predominancia Sativa de esta cepa se manifiesta en su crecimiento y efectos. Las plantas de CBD Supreme Durban tienden a ser altas y robustas, con una estructura que permite una buena aireación y exposición a la luz, características que favorecen un cultivo exitoso tanto en interiores como en exteriores. Esta versatilidad en el cultivo la hace accesible para jardineros de todos los niveles de experiencia, desde novatos hasta cultivadores con años de práctica.
En cuanto a su ciclo de vida, CBD Supreme Durban requiere entre 9 y 10 semanas para florecer, un período estándar para las cepas de predominancia Sativa. Los cultivadores pueden esperar cosechas generosas, con una producción que se destaca tanto en cantidad como en calidad. Las flores de esta cepa son densas y resinosas, cubiertas de tricomas que brillan con un atractivo visual inconfundible.
El perfil de sabor y aroma de CBD Supreme Durban es otra de sus cualidades destacadas. Los usuarios pueden esperar una combinación de notas dulces y especiadas, una mezcla que deleita el paladar y ofrece una experiencia sensorial rica y compleja. Este perfil de terpenos no solo contribuye al disfrute recreativo, sino que también juega un papel en sus efectos terapéuticos.
Desde el punto de vista medicinal, CBD Supreme Durban es una cepa multifacética. Su contenido equilibrado de THC y CBD la hace especialmente efectiva para tratar una variedad de condiciones. Los usuarios han reportado alivio en casos de ansiedad, depresión e insomnio, así como una disminución en los síntomas de dolor crónico y molestias musculares. Su efecto es predominantemente relajante y calmante, proporcionando alivio sin la intensidad que a menudo acompaña a las cepas con alto contenido de THC.
Además, CBD Supreme Durban también es conocida por su capacidad de estimular la creatividad y proporcionar un impulso de energía. Esto la hace adecuada para su uso durante el día, especialmente para aquellos que buscan un alivio medicinal sin comprometer su funcionalidad y productividad.