Esta cepa autofloreciente, resultado del cruce entre Lemon Skunk y Ruderalis, se distingue por su perfil sativa dominante, lo que le confiere efectos energizantes y creativos, muy apreciados para uso diurno o cuando se necesita un impulso de motivación.
Con un contenido de THC que oscila entre el 18% y el 24%, Lemon Skunk Auto se posiciona en el mercado como una alternativa potente, capaz de satisfacer tanto a consumidores novatos como a los más experimentados. Su aroma y sabor, profundamente marcados por notas cítricas y limón, invitan a una experiencia de consumo placentera y refrescante, ideal para aquellos que valoran el perfil terpénico de sus selecciones.
Desde el punto de vista del cultivo, Lemon Skunk Auto es una cepa que destaca por su adaptabilidad y resistencia. Apta para el cultivo tanto en interiores como en exteriores, esta planta autofloreciente no depende del ciclo de luz para florecer, lo que simplifica enormemente el proceso para los cultivadores, especialmente para aquellos que se inician en este arte. Con un tiempo de floración de 8 a 10 semanas, ofrece una rápida rotación para quienes buscan eficiencia y productividad en sus cultivos.
En términos de producción, Lemon Skunk Auto no decepciona. En interiores, puede alcanzar rendimientos de hasta 500 gramos por metro cuadrado, mientras que en exteriores, las plantas pueden producir hasta 600 gramos cada una, cifras que evidencian su generosidad y la hacen una opción atractiva para quienes buscan maximizar sus cosechas.
A nivel medicinal, esta cepa no solo ofrece alivio y bienestar a través de sus efectos psicoactivos, sino que también se destaca por su capacidad para mitigar dolores, combatir el insomnio y aliviar síntomas de artritis, gracias a su perfil terpénico rico en pineno, limoneno y cariofileno, entre otros. Estos componentes, conocidos por sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas, hacen de Lemon Skunk Auto una opción valorada en el ámbito terapéutico.
